Cada vez son más los conductores que admiten hacer uso de Facebook, Twitter o Instagram mientras conducen
Móvil y carnet
El Instituto Nacional de Estadística (INE) realizó en 2016 una encuesta que evidenciaba que el 94% de los niños de 15 tenía móvil. Pasados 3 años, esos jóvenes tienen ahora carnet de conducir (o al menos la gran mayoría) y la combinación de móvil y carnet es totalmente explosiva.
Y esta situación se entiende al ver las conclusiones obtenidas en un nuevo informe de la campaña Stop Distracciones, impulsada por BP, Castrol y el RACE. En él se demuestra que el uso de las redes sociales al volante se ha incrementado de forma exponencial, con las peligrosas consecuencias que supone.
El 12% de los conductores admite que consulta habitualmente las redes mientras conduce, este porcentaje se eleva al 17% entre jóvenes de 18 a 24 años, que han crecido con un Smartphone en la mano.
Prácticas de riesgo
Las distracciones ocasionan ya mayor número de fallecidos en carretera que el alcohol, y el teléfono tiene gran parte de culpa. Utilizar Facebook, Twitter o Instagram en el coche no elimina otras prácticas de riesgo sino que se añaden a ellas. Uno de cada cuatro conductores admite manipular el móvil durante la conducción para utilizarlo como GPS, hábito que supera al uso de WhatsApp (habitual para el 19%), las llamadas sin manos libres (14%) o leer correos electrónicos (13%).
Estos datos hacen referencia a aquellos automovilistas que realizan estas acciones como una rutina, no a los que caen de vez en cuando en ellas. Según el informe del NIE, aproximadamente 530.000 conductores reconocen haber sufrido algún incidente o accidente por culpa de estos hábitos.
Crecen los Atropellos
Los atropellos mortales de viandantes en las ciudades se han disparado en los últimos años, un 45% más en 2018 que durante el año anterior, según informa la DGT (Dirección General de Tráfico): “¿Somos conscientes del peligro al que nos exponemos? ¿Ponemos en riesgo a los demás de forma voluntaria? ¿Es un problema exclusivo de los conductores de coche?”, preguntas que se han hecho los autores del estudio y que encuentran un peligro ascendente en los vicios tecnológicos de los automovilistas.
Si se realiza una comparativa de los datos del informe de 2019 con los de 2014, se verá que el uso de los Smartphone ha aumentado a causa de la incorporación de nuevas funciones. Hace cinco años, únicamente el 0,5% de los encuestados manifestaba utilizar el móvil de manera asidua para consultar las redes sociales, frente al 12% actual. Apenas un 1% lo utilizaba para hacer fotos y vídeos (12% este año) y el 7,7% hacía uso de él como dispositivo GPS (25% en 2019).
En menor medida, pero también han aumentado las llamadas sin manos libres (del 12% al 14%) y el uso de la mensajería instantánea (14,4% frente al 19%).
Responsabilidad compartida
En la campaña Stop Distracciones también se ha localizado la existencia de un problema al otro lado de la línea telefónica. El 61% de las personas realizan de manera habitual llamadas aún sabiendo que su interlocutor estará conduciendo; un 61% les envía un mensaje (wasap, Telegram, SMS…). En estos y otros datos relacionados existe una clase de inconsciencia consciente: el estudio señala que “el 90% de las personas se han planteado que esa actitud puede provocar un accidente, además de que prácticamente el total de la encuesta (99%) entiende que usar el móvil al volante puede suponer un riesgo claro de accidente”.
Cuando se sale del coche también se registran usos inadecuados del móvil. El 63% de los peatones hacen o reciben llamadas mientras cruzan la calle; el 55% envía o lee wasaps y el 31% utiliza las redes sociales. El número de peatones atropellados ha crecido un 28% en los últimos 10 años, y los mismos peatones (un 90%) admiten el riesgo que suponen sus conductas con el teléfono móvil.
Fuente: El País