Horario de Verano

La DGT advierte que los  días posteriores a un cambio de horario pueden producirse en nuestro organismo desajuste que produzcan sueño, fatiga y distracción.

Desde la Comisión Europea se ha planteado la eliminación del cambio de horario que, en algunos países (entre los que se incluye España), se lleva a cabo un par de veces al año para acomodar las horas de luz al invierno y al verano.

Tendremos que esperar a la aprobación de esta iniciativa por parte de los Estados miembros y si se hace antes del próximo cambio horario, que tendrá lugar en la madrugada del domingo 28 de octubre, cuando atrasemos los relojes de las tres a las dos.

Si al final se establece esta iniciativa y nos quedamos con el horario actual de verano, podremos decir que la seguridad vial se beneficiará de esta decisión.

Podremos acabar al fin con los problemas biológicos de adaptación al nuevo horarios. Según advertencia de la DGT (Dirección General de Tráfico), durante los tres o cuatro días posteriores al cambio horario pueden originarse algunos desajustes en nuestro organismo que ocasionen sueño, fatiga y distracción.

El motivo es porque nuestro ritmo de vida continúa siendo el mismo, pero las horas ya no coinciden.

Horario de Invierno

Con el horario de invierno, anochece más pronto y los conductores, al menos en su mayoría, vuelven a casa de noche, sintiéndose más cansados, motivo que puede afectar a su capacidad de atención durante la conducción.

Además, cuando se circula a oscuras estamos obligados a adaptar la velocidad y la distancia de seguridad a esas nuevas condiciones.

La finalidad de esto es poder detener nuestro vehículo ante cualquier imprevisto sin riesgo de sufrir un accidente.

El uso del alumbrado de forma correcta también es necesario, sobre todo si tenemos en cuenta que las fases de oscuridad se irán incrementando diariamente hasta el solsticio de inviernos (el 21 de diciembre), día en el que el sol saldrá más tarde y se pondrá más pronto.

Al fin y al cabo se trata de ver y de ser visto.

Conducción de día

Durante los 365 días del año, el alumbrado diurno es totalmente obligatorio y en todas las vías en algunos países de la UE.

En España concretamente, la DGT aconseja a aquellos conductores que no tengan un vehículo con Luces de Conducción Diurna que enciendan la luz de cruce también durante el día.

Cuando sea de noche, es primordial que se activen adecuadamente las luces largas y las cortas.

En el Reglamento General de Circulación se nos indica que las primeras se han de utilizar de noche y cuando la iluminación de la vía sea insuficiente, lo que quiere decir, cuando no se pueda leer la placa de una matrícula a 10 metros o no se divise un coche oscuro a 50 metros.

Jamás deberemos deslumbrar al resto de usuarios de la vía.

A la iluminación exterior se le ha de sumar la importancia de la interior del coche porque a mayor luminosidad dentro peor es la visibilidad fuera del vehículo.

Este es el motivo por el que se deben llevar apagadas las luces del habitáculo y por el que también se ha de escoger una iluminación suave para el panel de instrumentación y otros elementos.

Conducir de noche

Hay algunos conductores que sienten más inseguridad al volante cuando conducen de noche a causa de la poca visibilidad del entorno.

Si además se detecta una mayor sensibilidad al deslumbramiento, visión borrosa o disminución del contraste se debería acudir a un especialista que pueda diagnosticar cualquier tipo de problema oftalmológico.

Por último, hay que mencionar que con el horario de invierno el estado de ánimo del conductor puede verse afectado, manifestándose una sensación de desánimo y un aumento de la sensación de sueño.

Estas sensaciones pueden verse ampliadas si se lleva la calefacción a una temperatura demasiado elevada.

Fuente: La Vanguardia