En 2050, un 86% de latinoamericanos residirá en ciudades, de ahí la necesidad de diseñar nuevos mapas urbanos que sostengan ese estilo de vida
Día Mundial del Urbanismo
El 8 de noviembre se celebra el Día Mundial del Urbanismo en más de 30 países de 4 continentes; arropados por esta fecha, la FIA Región IV (Federación Internacional del Automóvil) ha querido subrayar la importancia de impulsar medios de transporte alternativos al automóvil particular. También ha querido destacar la importancia de conseguir mejores redes de conectividad que enriquezcan la calidad de vida, disminuyan la brecha social y fomenten el desarrollo integral de las ciudades.
En el Día Mundial del Urbanismo se festeja el impulso del diseño de ciudades más eficientes en un sentido integral. Este impulso va desde movimientos de migración interna y externa, a la diversificación de actividades industriales y comerciales, así como a cambios en las redes de telecomunicación que transformaron el paisaje urbano mundial. Pero el mayor reto de las ciudades modernas radica en adaptarse a las nuevas demandas de los ciudadanos de una forma sostenible.
El transporte en la planificación urbana
Frente a esta situación, el transporte es uno de los ejes principales de la planificación urbana, esta industria produce una cuarta parte de las emisiones de CO2 relacionadas con el sector energético a nivel global, siendo también uno de los mayores agentes del cambio climático.
El gerente regional de FIA Latinoamérica, Diego Consetino, recalca que “es necesario que cada vez más ciudades se replanteen su diseño, poniendo el foco en la micromovilidad, como las bicicletas y los monopatines eléctricos para pequeñas distancias, y en el transporte público ordenado y accesible. El urbanismo no es un valor agregado, es una necesidad impostergable para una ciudad”.
La bicicleta
La bicicleta ha conseguido consolidarse en varias ciudades de Latinoamérica a través de la creación de ciclovías y de la implementación de programas como BA EcoBici. Ahora, a la micromovilidad se le añaden otras innovaciones como el monopatín. En ciudades como Caba, San Isidro, Mendoza, Rosario, Río de Janeiro, Sao Paulo, Florianópolis, Curitiba, Porto Alegre, Santos, Bogotá, Santiago de Chile, Montevideo y Lima se puede alquilar dispositivos eléctricos que son perfectos para moverse en distancias cortas.
Pablo Azorín, jefe de Seguridad Vial y Medioambiente de FIA, asegura que “a través de una planificación integral es posible que las ciudades logren disminuir el congestionamiento vehicular, los siniestros viales, la contaminación acústica y de gases contaminantes y la sobrepoblación de autos y transportes, creando un ambiente urbano que impacte positivamente en la calidad de vida de los ciudadanos, pero también en cuanto a la eficiencia en el uso del tiempo y la comodidad”.
El monopatín eléctrico
En Lima (Perú), por ejemplo, se ha estimado la presencia de usuarios frecuentes de monopatines eléctricos en 45000 y que el 90% de los desplazamientos se realizan de lunes a viernes en hora pico, hecho que conlleva una disminución considerable de las emisiones de CO2 y beneficia a todos los usuarios de la vía por una mejor circulación del tráfico.
Para las ciudades, el impulso del “transporte limpio” no es únicamente el cuidado del medioambiente y su incidencia sobre la salud, es algo que va más allá: accesibilidad, mejorar la administración de los tiempos y previsión a la hora de circular. ¿Y el transporte público? Es otra de las piezas fundamentales del urbanismo de este siglo y está relacionado con desalentar el uso del automóvil particular creando redes de conexión ágiles, puntuales, accesibles, que engloben y, en estos momentos, que también sean sostenibles.
El transporte público
Un ejemplo de esta innovación es el Transmilenio de Bogotá (Colombia), sistema de carriles exclusivos dispuesto en zonas urbanas que ha conseguido que se reduzca a un mínimo histórico del 16% los viajes en medios individuales de transporte. Por su parte, Medellín ha conseguido reducir la brecha social gracias a una inversión histórica en la red de transporte público urbano que, a día de hoy, llega a montañas y laderas con el Metrocable que, a su vez, enlaza con el metro y el tranvía.
Los taxis eléctricos
Asimismo, en la capital colombiana se van integrando paulatinamente taxis eléctricos cuyo número está previsto que llegue a 200 para finales de año y alcanzar los 1500 en 2021. A esto se le suman los primeros 64 autobuses totalmente eléctricos que circularán por el sistema Metroplús y por corredores especiales de movilidad eléctrica en el centro de la urbe.
Un 80% de la población latinoamericana reside en ciudades, para el 2050 esta cifra alcanzará el 86% y la flota de automóviles se verá triplicada en los próximos 25 años. Con este escenario, es vital la integración de la creatividad, el trabajo civil mancomunado, la tecnología digital y la decisión política para crear nuevos mapas urbanos que puedan diseñar nuevos mapas urbanos que puedan sostener el estilo de vida actual y estar a la altura de los retos que supondrá la tercera década de nuestro siglo para las próximas generaciones.
Fuente: El Cordillerano
