Con la campaña “No tenemos telepatía”, la DGT y el SCT quieren acabar con este mal hábito que pone en peligro tanto al conductor que realiza la infracción como al resto de vehículos

 

Una de las acciones que la totalidad de los conductores deberían tener interiorizada y llevar a cabo de manera inconsciente, casi de forma instintiva es la señalización del cambio de carril con el intermitente antes de realizar la maniobra de adelantamiento. Pero la realidad con la que nos encontramos es totalmente diferente. Más de la mitad de conductores tienen asimilado todo lo contrario, como si hubieran borrado de su mente la existencia de esa palanca al lado del volante, y en las autopistas pasan de un carril a otro sin poner el intermitente y sin alterarse lo más mínimo.

 

Estudio de la revista Autopistas

Según un estudio realizado por Autopistas, perteneciente al grupo Abertis, la mayor parte de los conductores no señalizan los adelantamientos. Tras la observación de 69.700 vehículos en diversos tramos de la AP-7, entre Salou (Tarragona) y Puçol (Valencia), se ha llegado a la conclusión de que el 53,1% de los vehículos no hacen uso del intermitente.

 

Esta cantidad es un 13,5% superior al año pasado, cuando también se realizó por primera vez el observatorio sobre el comportamiento de los conductores en la red de autopistas que ahora se ha visto finalizado con una segunda edición, permitiendo de este modo realizar una comparativa de la evolución sobre indicadores de seguridad vial en las vías rápidas.

 

La cantidad que no cumple con el intermitente es todavía más alarmante cuando el vehículo finaliza la maniobra de adelantamiento y retorna al carril de origen. En este caso son el 67,1% de conductores los que no señalizan la maniobra de ninguna forma, un 17,4% más que el año pasado. Cristina Zamorano, jefa del centro de seguridad vial de Autopistas, avisa de que “es un mal hábito que supone una alta peligrosidad para el conductor y para los otros vehículos, tanto al que se está adelantando como a los que vienen por el carril al que se incorpora ya que no pueden predecir las acciones del resto si no les avisan”. A pesar de no ser lo más común, la verdad es que esta es una infracción grave que recoge el Código de Circulación y que se castiga con 200 euros.

 

Campaña de Seguridad Vial sobre el uso del Intermitente

Buscando acabar con esta mala costumbre, Autopistas ha iniciado una campaña de seguridad vial, visible en los paneles informativos de las vías rápidas, con la intención de sensibilizar sobre el uso correcto del intermitente.

 

La campaña, que realiza la DGT (Dirección General de Tráfico) junto con el SCT (Servei Català de Trànsit) utiliza el lema: “No tenemos telepatía”.

 

La falta de la luz intermitente en los adelantamientos se atribuye a la dejadez del conductor, pero en otros casos a su agresividad. Uno de los hechos que más perjudica en relación a esto son aquellos vehículos que circulan por el carril izquierdo sin estar adelantando, acción que da lugar a adelantamientos por la derecha y genera situaciones de riesgo, mucho más si se realizan sin utilizar el intermitente. El 13,9% de los conductores utiliza el carril izquierdo de forma incorrecta, sin realizar un adelantamiento, cuando debería usar el de la derecha.

 

Conclusión del Estudio

Con el estudio realizado el año pasado por Autopistas se llegó a una conclusión preocupante: un alto número de pasajeros que viajaban en la parte posterior del vehículo no hacían uso de su cinturón de seguridad. Hecho que hizo saltar las alarmas y provocó la reacción inmediata por parte de estos, haciendo una fuerte campaña en las pantallas luminosas de sus carreteras. En el estudio de este año, el número de pasajeros del asiento trasero sin cinturón se ha visto reducido a la mitad, de un 21,3% del año pasado a un 10,7%. Los responsables de Autopistas quieren realizar una campaña parecida este año para insistir en el uso del intermitente en los adelantamientos.

 

La no utilización de los intermitentes “se convierte en un mal habito adquirido”, si se hace una vez se transforma en un incumplimiento rutinario…… y muy peligroso.

 

Fuente: La Vanguardia